viernes, 26 de agosto de 2011

Die wort.

La palabra es un estimulo superpoderoso que es capaz de bloquear hasta el dolor más profundo.
La palabra es capaz de modular todo nuestro sistema. Cualquier palabra, cualquier acción, cualquier verbo, cualquier tipo de pensamiento, es capaz de provocar liberación de neurotransmisores, es capaz de provocar determinadas situaciones en la conducta humana y es capaz de activar o disminuir hasta el sistema inmunológico...



La palabra es un arma poderosa y hay que tener en cuenta a la persona que la usa.
Es la única arma de conformación para lo bueno y para lo malo.
Cuidado con ellas.


Es cierto que hay palabras de ciertas personas que se las lleva el viento. Y menos mal.

lunes, 22 de agosto de 2011

Heute

En la vida no hay ganadores o perdedores, vencedores o vencidos, primeros o segundos
...
Simplemente hay maestros y aprendices.




Si tu me puedes en algo, adelante ¡tú ganas!... Yo aprendo.




sábado, 20 de agosto de 2011

El cántaro roto

Un cargador de agua tenía dos grandes cantaros que colgaban a los extremos de un palo que él llevaba encima de los hombros. Uno de los cantaros tenía una grieta, mientras que la otra era perfecta y entregaba el agua completa al final del largo camino a pie desde el arroyo hasta la casa de su patrón.

Cuando llegaba, el cántaro roto solo contenía la mitad del agua. Por dos años completos esto fue así diariamente. Desde luego el cántaro perfecto estaba muy orgulloso de sus logros, perfecto para los fines para la cual fue creado.

Pero el pobre cantaro agrietado estaba muy avergonzado de su propia imperfección y se sentía miserable porque solo podía conseguir la mitad de lo que se suponía debía hacer. Después de dos años le habló al aguador diciéndole: "Estoy avergonzado de mí mismo y me quiero disculpar contigo"...

¿Por qué? le preguntó el aguador.

Porque debido a mis grietas, solo puedes entregar la mitad de mi carga. Debido a mis grietas, solo obtienes la mitad del valor de lo que deberías.

El aguador se sintió muy apesadumbrado por el cántaro y con gran compasión le dijo: "cuando regresemos a la casa del patrón quiero mostrarte algo”.

Así lo hizo y en efecto, de regreso a casa le mostro muchísimas flores hermosas a todo lo largo del camino. El aguador le dijo: “¿Te diste cuenta de que las flores solo crecen en tu lado del camino?, tus grietas riegan el camino por donde tú vas todos los días y hacen crecer las flores, con lo cual el mundo se embellece. Sin ser exactamente como eres, el mundo no tendría la belleza sobre el campo.”


Incluso en la adversidad encuentra uno lo bueno. 

jueves, 18 de agosto de 2011

Irgendeine nacht


Llega un día en el que te paras, miras y piensas. Decides reflexionar acerca de tu vida (mal hecho) y te das cuenta, de que todo sería diferente con "algo". Y empiezas a imaginarte con ese algo, y los cambios que provocaría. Todos tus problemas y pesares estarían solucionados, todo iría a mejor... ay de ti...
De repente, pasa el tiempo, y debido a tu obcecado pensamiento recibes aquello que deseabas, y explotas de alegría... por fin... ello, ese algo que te faltaba te ha llegado, y con él, tu nueva vida... y te sientas, porque te gusta estar sentado, y miras. Miras la vida, como pasa, porque de un momento a otro vendrá lo bueno. Todos esos cambios, están ahí, ya los oigo, pero... 
Ya ha pasado tiempo desde entonces, y sigues viendo la vida, y lo bueno, todo aquello que vendría con tu "algo" no llega... y es entonces cuando te paras por segunda vez y te preguntas ¿Que no es ello lo que necesito para provocar esos cambios?. Y piensas. Reflexionas. Meditas.Y por último, asumes. Es ahí cuando te derrumbas. Toda tu estructura mental se cae y se desmorona sobre los ilusos cimientos que planteaste. Y te bloqueas. 
Ha pasado largo tiempo, y sientes que lo has perdido, esperando algo que nunca llegaría. Y encuentras lo bonito de la experiencia, porque siempre has sido positivo. Has aprendido. 
No era necesario ese "algo" para que tu vida cambiase. Y llega el día de lucidez, y te sientes poderoso con solo tu cuerpo y tu mente, como una gran máquina. Y te dices a ti mismo: lo único que necesito para que todo vaya como quiero es mi vida!. Pero, lo siento, llegas tarde. Estás intentando construir la coronación de tu edificio desmoronado, y las casas, no se empiezan por el tejado.
Y bajas a los cimientos otra vez, y aquí, vuelves a las primeras palabras de este texto. Y lees y escribes y vives mil veces lo mismo. 
Hasta que te cansas y lo sabes. La vida me ha ganado, ya no quiero jugar más. Y buscas papel pautado en el que refugiarte, porque, si hay algo que no te puede hacer daño, eso es la música. Escuchas, cantas, compones, todo lo que haga falta para no tener silencio y pensar.
Pero piensas. 


Llegará el día en el que rompas toda norma y ley (que bien conoces) y empieces a vivir.
Mientrastanto, te alejarás de todo aquello que, con tanto ruido, ni te escucha ni te deja gritar.

Ay de ti... Ay de ti y de todos los que pasan la vida, queriendo inventar la máquina de hacer felicidad.


La foto mola, no?